Para los memoriosos del golf, el nombre de Pedro Martínez no representa uno más. El profesional paraguayo fue, durante muchos años, el hombre récord del campo Alpa Sumaj. El “Bombardero”, nacido el 18 de octubre de 1963, se mantuvo varios años como el ganador del Abierto del Norte que presentó la mejor tarjeta, con 265 golpes (en 1988). En 2006 Andrés Romero logró superar esa marca, con 258.

- ¿Hace cuánto que no visitabas Tucumán?

- Fueron siete años sin venir. Dejé de jugar un tiempo, unos cuatro o cinco años, por problemas de lesiones. Entonces me metí a la enseñanza del golf en el club Paraná Country Club, en Ciudad del Este. Es a 330 kilómetros de Asunción, en la frontera con Brasil. Me va muy bien y ahora quiero intentar volver a jugar en Europa.

- ¿Qué recordás de aquella vez que ganaste en Tucumán?

- Cuando lo hice, era la tercera vez que venía para jugar un torneo. En la primera oportunidad quedé noveno, la segunda vez cuarto o quinto y la tercera fue la vencida: pude ganar. Fue algo maravilloso que me pasó en la vida, fue mi primer torneo internacional, además logré un récord de score. Recuerdo que apenas pisé el campo ya me sentía bien. Y eso que se trata de una cancha muy difícil, en la que enfrenté a jugadores de excelente nivel: recuerdo a Carlos Franco, Eduardo Romero, Miguel Fernández, entre otros. Haber ganado aquella vez me hizo sentir muy orgulloso.

- ¿Qué conocés del golf de Tucumán?

- Esta provincia creció muchísimo, en todo. Los golfistas son muy buenos y tiene campos excelentes. Da gusto estar aquí. Siempre estoy en contacto con “Pigu” Romero. Cuando va a jugar a Paraguay, a los torneos de Carlos Franco, nos juntamos, siempre estamos charlando. Me pasa lo mismo con César Monasterio, a quien le está yendo muy bien. Tengo muy buenos amigos acá en Tucumán.

- ¿Cuál es la diferencia del golf que desplegabas en aquel momento con el del presente?

- Entre 1988, cuando triunfé en Tucumán, y 2008 jugué muchos torneos y gané 30 internacionales. Ese año dejé y ahora estoy volviendo a hacerlo. No va a ser fácil, pero voy a intentarlo. Tengo que afinar más mi juego, debo estar en forma para competir contra los jóvenes que hoy son muy fuertes, juegan muy bien y tienen a la tecnología de su lado. La diferencia vale; hay que practicar mucho y yo lo estoy haciendo.

- Se te nota entusiasmado...

- En este deporte no podés entregarte nunca. Hay que pelear hasta el final. Y yo tengo ese corazón de luchador, cuando aflora puedo ganar.

- ¿Cómo ves el presente del golf paraguayo?

- Creció mucho a nivel profesional. Fabricio Zanotti es hoy el mejor del país, porque está jugando el Tour Europeo, en el que ya ganó en 2015. Marcos Ruiz también está jugando en el Tour Latinoamericano. Y está Carlos Franco jugando en EE.UU., a quien no le fue muy bien el año pasado, pero que siempre tiene margen para mejorar. Y Ángel Franco está jugando en Europa.

- ¿Tu estilo se adapta a lo que se está jugando hoy?

- Hay que hacerle muchas correciones. Yo tengo mucha calidad para pegar, pero hay que afinar más, practicar mucho. Por contrapartida, hoy los jóvenes van al gimnasio y es mucho más fácil para ellos. Pero a lo físico hay que incorporarle también lo mental.

- ¿Qué creés que pasará con tu regreso?

- Ojalá llegue al 80% de lo que fui. Hay hoyos para atacar y otros a los que hay que encararlos mansamente. Hay que respetar al campo, cada hoyo tiene su defecto, uno tiene que saber su estrategia de juego y de cancha.